miércoles, 30 de mayo de 2012

Miguel Ortega nos manda los siguientes refranes.


A Abril alabo, si no vuelve el rabo.
A balazos de plata y bombas de oro, rindió la plaza el moro.
A bicho que no conozcas, no le pises la cola.
A bien obrar, bien pagar.
A boda ni bautizado, no vayas sin ser llamando.
A borracho o mujeriego, no des a guardar dinero.
A buen amigo, buen abrigo.
A buen bosque vas por leña
A buen entendedor, pocas palabras.
A buena hambre, no hay pan malo.
A buen juez, mejor pastor.
A buenas horas, mangas verdes.
A burro viejo, poco verde.
A caballo comedor, cabestro corto.
A caballo regalado, no se le miran los dientes.
A cada cerdo, le llega su sábado.
A cada pajarillo, le gusta su nidillo.
A cada santo le llega su día.
A cada uno lo toca escoger, la cuchara con la que ha de comer.
A canas honradas no ha de haber puertas cerradas.
A caracoles picantes, vino abundante.
A casa de tu tía, mas no cada día.
A casa lleve un amigo; El s
A cualquiera se le muere un tío.
A cucharon grande pa quitar el hambre.
A Dios rogando y con el mazo dando.
A donde ira el buey que no haré A donde te quieran mucho, no vayas a menudo.
A embestida de hombre fiero, pies para que los quiero!
A enemigo que huye, puente de plata.
A falta de caballos, que troten los asnos.
A falta de manos, buenos son los pies.
A falta de pan, buenas son las tortas.
A grandes males, grandes remedios.
A jugar y perder, ganar y callar.