jueves, 10 de mayo de 2012

LA GATA CON BOTAS

   Cuento
                                                      La gata con botas
Había una vez una gata que la llamaban “La gata con Botas” Por que llevaba unas botas con tacón.
Fue la herencia para una hija de la molinera. A la mayor le toco el molino, la mediana el asno y a la pequeña esa gata. La hija pequeña se quedo mirando a la gata y a acariciándola mientras que decía:
-¡Que mala suerte la mía! ¿Como voy a ganarme la vida con una gata?
La gata pensaba... y decía a la vez:
-Aunque no te parezca pero, has tenido mas suerte que tus hermanas.
Se puso sus botas y se marcho corriendo a cazar palomos, conejos y toda clase de pájaros para dárselos a la Reina.
La gata al poco tiempo cazo un par de codornices y con ellas en el saco se dirigió al castillo de la reina.
Cuando llego a la puerta se encontró a tres centinelas que vigilaban la puerta y, después de haberles saludado con educación le pidió ausencia con la Reina.
- Tengo un mensaje importante para su majestad.
Cuando ya entro a donde estaba la Reina y sus consejeras le dio el saco y dijo:
-Esto lo traigo de nombre de mi dueña me a dicho que te lo traiga para ti Majestad.
-Muchas gracias, no sabia que ella podía cazar esto ni tampoco savia que me gustaban las codornices.-Dijo la Reina sorprendida.
Cada día la llevaba algo a la Reina un conejo, una liebre, palomos, mas codornices...
Un día la gata se entero que el carruaje de la Reina pasaba cerca del río y le dijo a su dueña que se quitara la ropa y se metiera en el río ella le hizo caso y se metió, al poco rato paso el carruaje con la Reina y sus consejeras la Gata gritó ¡Socorro! ¡Socorro! ¡Mi dueña se esta ahogando! ¡Ayuda!
La reina le dijo a sus consejeras que ayudaran a la muchacha a salir del río.
La gata que no se daba satisfecho llego al castillo donde vivía un ogro que siempre asustaba a los habitantes del reino y llamó a la puerta.¡Pom, Pom!La gata se puso hablar con el ogro y preguntadole cosas.
Como el ogro era mágico se conbirtio a el mismo en un raton, la gata se hecho encima y se lo comió. Después de relamerse los bigotes la gata fue al encuentro con la Reina y su dueña.
Su dueña no podía dejar de mirar al apuesto Príncipe por que ella se había enamorado de el...
Así fue como la gata hizo a su dueña rica y feliz. Pero a la gata... tampoco le faltaba nada.
NOMBRE: Elia Ruiz Domínguez 5ºD